lunes, 25 de abril de 2011


Parábola de las flexiones de pecho

 Por Carlos Rey

Esteban era el alumno más fornido de la clase de religión del profesor Pérez. Un día el profesor le pidió que se quedara un rato después de la clase, y le preguntó:
—¿Cuántas flexiones de pecho puedes hacer?
—¿Flexiones de pecho?
—Sí, también se conocen como planchas y lagartijas.
—¡Ah! Puedo hacer sesenta —le contestó Esteban.
—¿Sesenta? ¡Muy bien, Esteban! —lo felicitó el profesor—. ¿Crees que podrías hacer ciento veinte?
—No sé —respondió Esteban—; nunca he hecho ciento veinte seguidas.
—¿Qué tal si las haces en series de cinco? Para que mi plan dé resultado, necesito que este viernes hagas ciento veinte en series de cinco. ¿Crees que puedes hacerlo?
—Bueno, creo que sí. Por lo menos puedo intentarlo. Y así quedaron. 

Ese viernes al comienzo de la clase el profesor Pérez sacó una caja llena de las galletas predilectas de todos.
El profesor se acercó a la primera niña en la primera fila y le preguntó:
—María, ¿quieres una galleta?
María respondió:
—Sí, gracias.
—Entonces el profesor se volvió a Esteban y le preguntó:
—Esteban, ¿puedes hacer cinco flexiones de pecho para que María reciba una galleta?
—Claro —dijo Esteban—, y comenzó a hacer cinco flexiones.
Tan pronto como Esteban terminó de hacerlas, el profesor puso una galleta sobre el pupitre de María. De ahí pasó a José, el próximo alumno, y le preguntó:
—José, ¿quieres una galleta?
Cuando José le dijo que sí, el profesor le pidió a Esteban que hiciera otras cinco flexiones, Esteban las hizo, y José también recibió su galleta.
Así procedieron hasta que terminaron la primera fila. Esteban hizo cinco flexiones por persona para que cada una pudiera recibir su galleta. En la segunda fila llegaron a Pedro, el capitán del equipo de fútbol. Cuando el profesor le preguntó si quería una galleta, Pedro respondió:
—¿Acaso no puedo hacer las flexiones yo mismo?
—No, las tiene que hacer Esteban —le contestó el profesor.
—Entonces yo no quiero una galleta —replicó Pedro.
No obstante, el profesor le pidió a Esteban que hiciera cinco flexiones de pecho para que Pedro recibiera la galleta que no quería, y le dijo a Pedro que si no quería la galleta, que la dejara encima del pupitre.
Al ver que Esteban sudaba y que ya no volvía a levantarse entre series porque le exigía demasiado esfuerzo, los alumnos de la tercera fila dijeron uno tras otro que no querían la galleta. Sin embargo, cada vez que Esteban hacía otras cinco flexiones, el profesor ponía una galleta en el siguiente pupitre.
Al final de la cuarta fila, los brazos de Esteban le temblaban con cada flexión, y gotas de sudor le corrían por el rostro, así como las lágrimas de los alumnos que lo observaban. Cuando terminó de hacer la última flexión, consciente de que había logrado hacer todas las flexiones necesarias, sintió que se le desplomaron los brazos y cayó de bruces contra el piso.

El profesor Pérez dijo entonces:
—Fue así como nuestro Salvador Jesucristo exclamó con fuerza: «¡Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu!» Lucas 23:46
Y consciente de que había hecho todo lo necesario para pagar el precio de nuestra salvación, se desplomó en la cruz y murió, aun por los que no querían aceptar esa salvación.

 

Enfrentando a los Gigantes que nos atormentan!

 


Un científico encontró la primera evidencia arqueológica que sugiere que la historia bíblica de David matando al gigante filisteo Goliat sucedió en realidad.
Un fragmento de un cuenco de cerámica, aproximadamente del año 900 antes de Cristo, fue desenterrado en Tell es-Shafi. La excavación se ubica en el lugar de la antigua ciudad de Gath, que la Biblia menciona como la ciudad natal de Goliat.
La ceramica tiene una inscripción en arcaico semítico que dice ” Alwat” y ” Wit”, probablemente la interpretación filistea del nombre de Golia, dijo Aren Maeir, el arqueólogo que dirige la excavación. ” Es un hallazgo revolucionario”, dijo. ” Aquí tenemos una prueba preciosa de que el nombre de Goliat que aparece en la Biblia en el contexto de la historia de David y Goliat, no es una especie de recreación literaria posterior”.
La pieza no es lo suficientemente antigua para haber pertenecido al propio Goliat, pero es la primera vez que en la tierra de Israel se ha hallado el nombre de Goliat, o un nombre parecido a Goliat.
” No he hallado el esqueleto de Goliat con un agujero en la frente, pero es la primera prueba arqueológica de una localización filistea lo que da una fuerte credibilidad a la historia” , dijo el científico, también jefe del departamento de arquelogía en la Universidad de Barllan cerca de Tel Aviv.
Meir dijo: ” Hasta ahora la mayoría de lo que sabíamos sobre los filisteos es desde el punto de vista de la Biblia…Obtenemos una visión muy, muy subjetiva. Eran malas personas, bárbaros, no tenemos nada bueno sobre ellos” ” Cuando miramos a los filisteos desde el punto de vista arqueológico obtenemos pruebas de una cultura muy rica, dinámica, fascinante y avanzada”, dijo el científico.
Tomado de REU. Israel.

La Biblia no se equivoca. Cada día la ciencia comprueba que la Biblia tenía razón. No te apartes de este Libro y deja que ese libro te sane tu pasado, te aclare el presente y te guie en el futuro y te proyecte a la eternidad.

Salió entonces del campamento de los filisteos un paladín, el cual se llamaba Goliat, de Gat, y tenía de altura seis codos y un palmo. 1 Sam 17:4
Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada, lanza y jabalina, pero yo vengo a ti en el nombre del Señor de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has desafiado.
El Señor te entregará hoy en mis manos, y yo te derribaré y te cortaré la cabeza. Y daré hoy los cadáveres del ejército de los filisteos a las aves del cielo y a las fieras de la tierra, para que toda la tierra sepa que hay Dios en Israel. 1 Sam 17:45,46

sábado, 23 de abril de 2011


Como Cordero
"Como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca" Isaías 53:7
En 1602, el artista italiano Caravaggio pintó un cuadro titulado “La captura de Cristo”. Esta obra, una muestra temprana del estilo barroco, es cautivante. Hecha con matices oscuros, permite que el observador contemple el arresto de Jesús en el huerto de Getsemaní. Dos elementos notorios de la escena descrita en la pintura captan la atención de quien la contempla. El primero es Judas, dando el beso traidor. Sin embargo, la vista luego se centra inmediatamente en las manos de Jesús, las cuales están suavemente entrelazadas mostrando que no ofrecía ninguna resistencia ante esa injusticia.
Aunque Cristo tuvo el poder para crear un universo, se entregó voluntariamente a sus captores y a la cruz que le aguardaba. 
Mucho antes de que tuviera lugar esta escena, Jesús les dijo a sus oyentes que nadie podía quitarle la vida, sino que Él la ponía voluntariamente (Juan 10:18). 
Esta actitud de entrega voluntaria fue profetizada por Isaías, quien escribió: “Como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca” Isaías 57:3. 
Él se dio todo por nosotros y lo hizo simplemente por amor, el apóstol dijo: “el justo por los injustos para llevarnos a Dios” 1Pedro 3:18. 
El sacrificio personal de Cristo, es una muestra maravillosa de la grandeza de Su amor por nosotros. Como nos lo explicara El mismo: 
“Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos” Juan 15:13.
Piénsalo. ¡Hasta tal punto te amó Jesús!
En estos días de Pascua, recuerda cuanto hizo y el precio que pagó para salvarnos. Aparta un tiempo personal ante el Señor Jesús para decirle gracias, para expresarle tu amor, para adorarle en lo profundo del corazón.

Reflexión: El sacrificio del Señor Jesucristo revela el corazón de Dios inundado de amor por ti y por mí.

Autor: Editores de Nuestro Pan Diario.

¡Dios les bendiga y Felices Pascuas!